Pese a que la Primera RFEF haya empezado en agosto y no en septiembre, el debut del nuevo y renovado Barça B se asemejó mucho al típico retorno escolar. Profesor nuevo, muchas caras nuevas entre los compañeros y sensación aún de verano en el ambiente, pues la afición blaugrana brilló por su ausencia. Como si solo hubieran acudido los padres a recoger sus hijos al fútbol.
Sergi Barjuan, en su estreno y sin saber por dónde empezar a enseñar tantas nuevas lecciones, hizo como los profesores majos en el primer día y empezó con el tema 1: la defensa. Arnau Comas y Arnau Tenas, uno como central y el otro como portero líbero, se exhibieron en la salida de balón del filial. Más fuertes no podían empezar.
Pese a los 20 minutos iniciales en que el Barça B marcó el 1-0 y estrujó al Algeciras hasta no dejarle respirar a base de ataques rápidos y profundos comandados por el sector izquierdo de Alejandro Balde y Antonio Aranda, eso no fue más que un espejismo. Peque tuvo que abandonar la clase por lesión antes de la media hora, pero eso solo el inicio del cúmulo de problemas que se le fueron presentando a los futbolistas blaugranas en su vuelta al cole.
Los 20,8 años de media del once titular en la inauguración de la competición se evidenciaron a lo largo de la segunda parte. Primero fue Arnau Comas. Como el que comete alguna falta de ortografía garrafal por culpa de no haber cogido un boli durante todo el verano, Comas, que estaba siendo el mejor e irónicamente debía demostrar sobriedad en su debut como capitán, vio la roja directa tras una falta siendo último hombre. La primera en la frente.
Y como los más buenos en clase suelen ser los que les ponen los problemas de matemáticas más difíciles, a Arnau Tenas le tocó ver como un gol olímpico del Algeciras resultaba un problema irresoluble para él. La segunda en la frente.
Finalmente, en un ejercicio de resistencia del Barça B cambiando a muchos jugadores para no cansar a un equipo con 10 y con Tenas con la moral herida, el Algeciras no llegó a remontar y la vuelta al cole no acabó siendo ni tan brillante como parecía al inicio, ni tan mala como se mostraba tras el 1-1 más la expulsión. Pues como todas las vueltas al cole de los chavales.
ESTADI JOHAN 