El F.C Barcelona ha presentado este lunes en el campo de entrenamiento Tito Vilanova de la Ciutat Esportiva Joan Gamper a Jules Koundé, defensa francés de 23 años procedente del Sevilla F.C. La llegada de este futbolista al Camp Nou supone para el equipo azulgrana reforzar con creces su zaga y la incorporación de un jugador de primer nivel a la plantilla. A continuación, se explicarán algunas fortalezas del nuevo central culé que permitirán entender por qué Xavi Hernández consideró su fichaje como prioritario para implantar su modelo de juego.
1- Polivalencia
Una de las mejores virtudes del francés es la capacidad de adaptación que tiene para jugar en distintas posiciones. Koundé puede amoldarse para desempeñar cualquier rol que conforma la línea defensiva ya sea como central puro -siendo útil tanto en el perfil izquierdo como en el derecho- o lateral.
Jules disputó a lo largo de la pasada campaña liguera 32 partidos: 31 de ellos como titular, promediando así un total de 86 minutos jugados por partido. Además, formó uno de las mejores duplas de centrales junto a Diego Carlos durante su estancia en el conjunto hispalense, a pesar de que el brasileño estuvo un peldaño por encima de su compañero en cuanto a rendimiento, en el pasado curso.
Aun así, la versatilidad y disciplina hacen del galo un futbolista único en la competición doméstica, tal y como afirmó Gustavo Poyet, exentrenador de Koundé en el Girondins de Bordeaux y actual seleccionador de Grecia, en ‘El Larguero’ de ‘Cadena Ser’: «A pesar de que tiene unas buenas condiciones para jugar de lateral, a mí me encanta de central. Es veloz, potente y le gusta salir con el balón desde atrás».

2- Salida de balón
Xavi Hernández exige mucho a sus centrales. Salir limpiamente desde atrás es una de las máximas prioridades para el técnico de Terrassa y ahora tiene sumamente resuelta esta faceta del juego con Jules Koundé a sus órdenes. El nuevo jugador azulgrana entiende a la perfección qué soluciones debe aportar para ayudar al equipo, en este sentido. Desde abrir al máximo su posición, siendo una vía de progresión para el guardameta en reinicios hasta batir líneas de presión rivales mediante conducción de balón.
Por otro lado, presenta una finura en el toque que le permite generar ventajas a través de controles. Además, el pase es una de sus mejores armas, ya que le posibilita encontrar a sus compañeros en situaciones más ventajosas en campo rival.


Cabe recalcar, que el nuevo defensa culé ha mejorado notablemente en esta vertiente futbolística, gracias a Julen Lopetegui. Su madurez futbolística no se entiende sin la influencia del actual entrenador del Sevilla F.C, pues fue clave en la progresión del jugador, adaptándole a la idea propositiva de su equipo y dándole un rol clave en el mismo a lo largo de las tres temporadas que ha recalado en el elenco andaluz.
3- Presencia en ataque
Asimismo, el central galo no tiene ningún reparo, cuando decide sumarse al ataque. Todo lo contrario. Es un recurso muy valioso, puesto que permite aportar profundidad y dinamismo a partes iguales. Se incorpora con libertad, especialmente por el sector derecho cuando ejerce de lateral y sabe el momento exacto en el que debe proyectarse para hacer daño al equipo rival. Interpreta las jugadas de ataque y a partir de ahí se mueve por el terreno de juego, una vez ha detectado qué espacio ocupar o atacar.
Sus desmarques de ruptura son uno de los movimientos que más ha empleado en estos últimos años. Su tendencia a realizar este tipo de acciones permite ampliar su zona de influencia, al mismo tiempo que arrastrar marcas, dar lugar a nuevas vías de pase o llegar a línea de fondo para meter un centro al área contraria.
4- Solidez defensiva
A nivel defensivo, Jules Koundé es también un jugador extraordinario. Sus condiciones físicas y futbolísticas le permiten ser un excelente corrector. Es un central que no tiene problemas para estar atento a cualquier tipo de adversidad defensiva que pueda surgir en el césped y actuar a partir de una cobertura, barrida, indicación, etc. Tener muchos metros que recorrer a su espalda no supone un problema para él, al igual que sacar la línea defensiva para activar presión.
De igual modo, en el cuerpo a cuerpo es correoso y difícil de superar en el 1vs1. Solamente, ha sido regateado 0,3 veces por partido durante la pasada campaña. También, en el juego aéreo se encuentra uno de sus puntos fuertes (2,4 duelos aéreos ganados por partido: 61%) y como consecuencia también puede ser una herramienta poderosa de cara a las acciones a balón parado.