EL reciente e incendiario comunicado del Barça marca el pistoletazo de salida de lo que puede ser (y seguramente así sea) el mayor conflicto de la historia del fútbol español que además cruzarÁ rápidamente los pirineos debido a la presencia de la UEFA.
La que se puede armar en los próximos años a raíz del estallido del caso Negreira es de proporciones absolutamente bíblicas, no sólo para un Barça que parece estar aprovechando esta ligera calma para preparar una contraofensiva (espero que Laporta no se le olvide la rueda de prensa explicando el porqué de pagarle al señor Negreira que nos había prometido) con la cual hacer que se deje de centrar la atención en él, el objetivo parece claro, tirar todo abajo y remover los cimientos del deporte rey en España como nunca se había hecho antes. La tarea parece ambiciosa cuanto menos teniendo en cuanta la posición actual de las partes, unas partes a las que se ha sumado recientemente una UEFA dirigida por el para nada sospechoso de tener chanchullos extraños Aleksander Ceferin que con el tema de la Superliga (más importante de lo que parece en todo esto) de por medio parece tener ganas de sancionar. El próximo movimiento de los culés parece estar emplazado para mediados de mes (se comenta que el día 12 más en concreto) en la esperadísima rueda de prensa de Laporta explicando todo el asunto de los pagos al exvicepresidente del CTA , una rueda de prensa que ya lleva más retrasos que un tren en Badajoz o un juego de Ubisoft. Comienza un largo viaje hacia las profundidades que puede cambiar muchas cosas en el paradigma futbolístico español y europeo.
EL Hombre que siempre desmiente
El último pifostio se ha montado a raíz de una información de La Vanguardia que versaba que Javier Tebas había aportado a la fiscalía que investiga el caso Negreira una prueba falsa sacada de rumores sobre prácticas extrañas de Sandro Rosell y Josep María Bartomeu (¿La Vanguardia saca esto de forma altruista o para defender a su amigo Sandro?) En un principio nadie se hizo eco de esto (sospechoso) pero todo estalló a raíz de un inesperado y durísimo comunicado del Barça en el que exigen la dimisión de «El Hombre que siempre desmiente» Javier Tebas. Evidentemente el «honorable» presidente de La Liga no se ha quedado de brazos cruzados y se pasó el día de ayer haciendo lo que mejor se le da, meterse de palos con otros en Twitter, por la mañana haciendo lo de siempre, es decir, desmentir rotundamente al diario catalán y pedir rectificación, lo típico. Pero la miga de esto vino por la tarde y es su reacción al comunicado del FCB, una respuesta en la que a pesar de la enorme cantidad de texto que se encuentra en la captura de pantalla que utiliza, no llega a desmentir ni aclarar casi nada, más bien sólo explica como contactó con fiscalía para realizar un documento en el que expresa que desde La Liga sospechan algo; es decir, la supuesta prueba falsa presentada puede seguir existiendo perfectamente.
Tebas, el hombre que nos tiene acostumbrado a contestar exaltado y incluso en mayúsculas para desmentir todas las informaciones que le señalan (ver su recientes discusiones con Jorge Calabrés y Javier Matallanas), por primera vez en tiempo lo hemos visto dar una respuesta a medias y dando un rodeo, desconcertante cuanto menos el asunto.
Guerra Total
Pero dejando de lado lo ocurrido en el día de ayer (que no parece tener demasiado recorrido), lo realmente importante es el conjunto en su totalidad, todo este proceso tiene el trasfondo claro de una lucha sin cuartel por el control del Fútbol Club Barcelona, un club que tras sufrir el mayor expolio de la historia del deporte se encuentra jugándose el todo por el todo a diario y con el modelo de propiedad más entredicho que nunca y con los buitres revoloteando un maltrecho Camp Nou en busca de carroña. El elevado interés de varios personajes, especialmente Tebas, en que el Barça sea comprado es más que evidente y por eso el club debe ir con pies de plomo pero dispuesto a defenderse a cualquier precio, de Tebas hay que decir que en este caso tiene un punto débil claro que es su buena relación con Albert Soler.
Dicho esto, resulta primordial que Joan Laporta comparezca de una santa vez en rueda de prensa para explicar el porqué del inicio de la relación con Negreira y porque él no solo no cortó sino que aumentó dichos pagos durante su primer mandato al frente de la institución, se lo debe a los socios y aficionados del club por su condición de máximo mandatario del mismo. Está en juego el modelo de propiedad, el legado de los mejores 3 lustros de la historia de la entidad… Muchas incógnitas por resolver.
A todo esto el tema superliga puede jugar un papel interesante en todo este asunto debido no sólo al conflicto abierto con la UEFA del cual se espera próximamente una sentencia que puede desencadenar consecuencias bastante serias sino por las tiranteces que parecen haberse creado en el binomio Barça-Madrid a raíz de que el club blanco se haya decidido personar a la causa de Negreira en calidad de perjudicado.
Se espera una contraofensiva del Barça en los próximos meses y los contendientes pareen estar más que preparados para la batalla, a priori parece una de esas series en las que hay infinitas subtramas y al final todo el mundo sale escaldado de una forma u otra, pero para saber el final aún queda un muy largo tiempo tras el que probablemente no quede nada por refundar en el fútbol español, un fútbol que si ya estaba en decadencia por la cada vez más acuciante falta de talento y la crisis económica además de por la negligente gestión de sus mandamases; tras la tormenta que parece cernirse sobre él va a pasar un muy mal rato.
El Extraño pacto
Otra cosa que deja en claro lo ocurrido ayer a raíz de la noticia de La Vanguardia (que por cierto hoy ha publicado un editorial aún más contundente sobre el asunto) es que es la primera escenificación de un extraño pacto, uno que nos dicen hace 10 años que llegaría a producirse nos llevamos las manos a la cabeza y es el aparente pacto de no agresión entre el grupo Godó y Joan Laporta, los antaño enemigos acérrimos y irreconciliables parecen haber establecido una alianza «por el bien de todos» con el objetivo de ejercer una estrategia de defensa común. Para los que estamos al tanto del funcionamiento del entorno del Barça esta noticia resulta más que sorprendente visto el acoso continuo hacia Laporta que ejerció este grupo editorial durante su primer mandato. ¿Será en defensa del club en sí? ¿Será porque el grupo Godó tiene a varios amigos suyos jodidos en este caso? La respuesta solo la revelarán los futuros acontecimientos.
Cartas echadas
Las cartas ya parecen echadas, los objetivos de cada uno parecen claros y desde fuera el público ya tiene a mano las palomitas y la Coca Cola. Será una partida a vida o muerte para la mayoría de implicados y las consecuencias pueden ser devastadoras para este deporte. Empieza el juego, comienza el viaje, la expectación es máxima ya que estamos presenciando historia en movimiento, en vivo y en directo. Múltiples frentes abiertos, muchas conexiones en una guerra por tierra, mar y aire que solo ha hecho que comenzar.