Partido que tenía marcado en el calendario por la personalidad e identidad de ambos equipos comandados por Garcia Pimienta y por Óscar Cano, dos entrenadores, bajo mi punto de vista, de los mejores de la categoría.
El juego se entreve similar y una experiencia inapropiada en esta categoría, veremos en el Estadi Johan Cruyff un gran partido.
La convocatoria resaltaba por segunda vez consecutiva de Ilaix Moriba, las bajas no cambian Carevic, Sarsanedas y Cuenca lesionados y Carles Pérez y Ansu Fati convocados con el primer equipo. Así que el once, es uno de los habituales en can Barça, Peña en portería, Morer, Araujo, Mingueza y Akieme en defensa, centro del campo que gusta en el estadi, Jandro, Monchu y Riqui Puig y arriba Alex Collado, Hiroki Abe y Kike Saverio.
Una primera parte que se iniciaba con mucho respeto y mostrando con disimulo pequeñas cartas, paciencia y velocidad en el juego eran las primeras señales del conjunto azulgrana, mientras que por parte del Castellón, presión alta en campo rival y buscar de forma rapida la ocupación de espacios dejados por los interiores del filial azulgrana. Las ocasiones y acercamientos iban cayendo por ambos bandos, pero sin ocasionar ninguna parada de los porteros, a destacar de esta primer parte la magnifica presión tras pérdida del filial.
Ya en la segunda mitad y cuando solo pasaban cinco minutos, la buena presión alta del Castellón daba sus frutos y se adelanta en el marcador, pese el gol, el Barça B siguió dominando y transformando sus largas posesiones en ocasiones, pero sin lograr superar al portero rival. Pese a todo lo bueno que mostraba el filial, se veía al Castellón cómodo cuando manejaba el esférico y atraía al Barça a su campo y filtraba pases con receptores bien posicionados liberados. Los últimos diez minutos la ocupación del campo contrario por parte azulgrana era constante, tanto era así, que en el minuto 83, Araujo, otra vez, hacia el empate a 1. Una buena jugada de Mingueza, para mí el mejor del conjunto de Garcia Pimienta, le hacían penalti a Kike, Monchu transformaba el 2-1, después del gol, el Castellón base de centro laterales lleno el área de Iñaki Peña, pero el marcador no se movió.
El filial acaba con la racha del Castellón y como era de esperar, partidazo en el Estadi.